Señorio de Beade

1987

Año de fundación

Bodega

Bodegas y viñedos Señorio de Beade

Señorio de BEADE

D.O. Ribeiro

Blancas: Treixadura, Godello, Torrontés, Loureira, Albariño
Tintas: Mencía, Sousón, Caíño Tinto

Sandra Cortes

Variedades de uva

Enólogo

Denominación de Origen

Viñedos propios de cuarta generación

D.O. Ribeiro

Los suelos son muy pobres, con bajo contenido de arcilla, pero con una característica del Ribeiro, un alto contenido de arena granítica llamada "Sabrego". Las montañas aíslan la región de la influencia del océano Atlántico. El clima ligeramente continental, combinado con los vientos predominantes, provoca una gran diferencia de temperatura entre el día y la noche, lo que favorece la maduración lenta de los polifenoles, haciendo que el vino sea intenso y aromático.

Las condiciones del suelo y el clima en el valle del río Avia son óptimas para el cultivo de variedades autóctonas, como Treixadura, Albariño y Loureira entre las uvas blancas, y Mencía, Caíño y Sousón entre las uvas tintas.

Viñedos

Historia de la bodega

Señorío de Beade es una bodega familiar fundada por la familia González-Vázquez en 1987, ubicada en la localidad de Beade, en Ourense, dentro de los límites de la D.O. Ribeiro. Desde su fundación, se han realizado importantes inversiones y se han implementado las tecnologías más avanzadas para la producción de vinos blancos y tintos, teniendo en cuenta las tradiciones vinícolas locales y las características de las variedades autóctonas de uva.

Bodegas A Portela expresa la esencia de los vinos de Ribeiro. La bodega produce vinos a partir de variedades autóctonas de uvas tintas y blancas, cultivadas en las laderas del río Avia, desde donde se origina la D.O. Ribeiro.

Viñedos

Actualmente, la bodega posee 12 hectáreas de viñedos propios y gestiona de manera exclusiva otras 15 hectáreas de parcelas en el valle del río Avia en Beade. La orientación óptima de los viñedos, la exposición solar y las características del terreno confieren a los vinos cualidades distintivas que los hacen únicos y característicos.

El uso de variedades autóctonas, combinado con un trabajo de calidad en la bodega, permite producir vinos con carácter, que se distinguen por su elegancia, frescura y un marcado perfil varietal. Esto se ve reflejado en los numerosos premios y el reconocimiento a nivel nacional e internacional.